La reboda

Lo nuestro iba para un amor de verano pero antes de darnos cuenta se había convertido en una cosa mucho más grave. Entonces me mandaste esa canción y nos dejamos ir...




Si véns amb mi,
no demanis un camí planer,
ni estels d'argent,
ni un demà ple de promeses, sols
un poc de sort,
i que la vida ens doni un camí
ben llarg.

A la vuelta de siete años el camino hasta aquí no ha sido llano ni ha habido estrellas de plata ni un mañana lleno de promesas pero ¡hemos tenido suerte! porque a pesar de los pesares seguimos amándonos y juntas.

Por mi parte puedo decir que no te quiero como antes. Tampoco es que te quiera mas... o si, no es una cuestión de cantidad.

En cierto sentido te quiero desde un lugar más profundo, por otra parte cuando te observo sin que te des cuenta me sigues pareciendo esa niña preciosa que me fascinó hace siete años...

El caso es que hoy me recaso contigo ¡y lo hago muy feliz!. Esta noche repetiremos el ritual de vestirnos y peinarnos de domingo, escucharemos al bueno de Alfred diciéndonos cosas acerca del compromiso, volveremos a soltar lagrimillas de emoción. Tendremos una rica cena y bailaremos con la música que decida Rafa, Farala nos tomará muuuuchas fotos y como la crisis viene muy fea y muy mala, festejaremos con los amigos queridos que puedan estar con nosotras.

¡Carpe Diem! ya vendrá el día de mañana y tendremos tiempo para volver a la realidad.