septiembre 11, 2010

1991

La entrada número cien me parece una buena oportunidad para abrir una nueva etiqueta en mi blog: banda sonora.

En esta etiqueta escribiré acerca de las canciones que son significativas en mi vida y el momento en que aparecieron o al menos lo que más me hacen evocar. La primera que elijo viene de muy atrás, de 1991, a mis veintiocho, casi veintinueve años. Ahora lo puedo ver desde fuera:

Tarde de verano en el salón del piso donde vivía en ese tiempo mi (dis)pareja, en la época de oro de mi periodo como rescatadora.

Tumabada en el sofá, escucho música que he puesto a todo volumen en el equipo de sonido. Ella va y viene haciendo ruido con lo que pilla a su paso: de la cocina a la recámara, de allí a la terraza, luego al salón, de nuevo a la cocina...

Yo estoy en el séptimo cielo. He encontrado en el nuevo disco de mi cantante mexicana favorita la canción que será uno de mis himnos:



(Aquí la letra)

Pongo la canción una vez, dos, tres... la canto a voz en cuello... estoy feliz.

De pronto mi (dis)pareja se coloca delante de mí completamente furiosa:

- "¿No puedes dejar eso? Siempre tienes que poner la música tan alta porque lo que pasa es que no quieres hablar conmigo, yo no sé para qué vienes si de todas maneras voy a estar sola porque tú estás en tu mundo... claro lo que pasa es que (retahila de reproches)"

Me levanto. Quito el disco. Apago el equipo de sonido. Le digo que la música no me impide hablar con ella. Trato de que se le baje el enojo. De golpe pierdo la sensación de bienestar que me daba la música. La tarde sigue tensa hasta que me voy a mi casa sintiéndome culpable y frustrada a partes iguales. He "echado a perder" el rato de convivencia...

Pero en el fondo va surgiendo una llamita de enojo también... ¿qué hay de malo en que me guste la música? ¿qué tiene esa canción que le enoja tanto? ¿acaso lo que le enoja es que a mí me guste? ¿tener pareja y mundo interior propio y privado son situaciones incompatibles? ¿porqué me siento como prisionera?

De todo eso hoy en día lo que queda es el recuerdo de aquella tarde porque fue allí cuando comencé a vacunarme para no caer en el futuro en una relación tóxica ni con parejas ni con amigos ni aún con la familia... y si, esa canción sigue siendo uno de mis himnos personales.

12 comentarios:

  1. coño, es que la letra es heavy, jajajaa, y si ella se daba por aludida me imagino su cara. Enhorabuena por haber sabido huir de relaciones tóxicas.

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  2. Esa canción es una inyección de vitaminas contra el miedo y contra la resignación. ¡Me gusta y me la quedo! (la desconocía). Lo conseguiste(mos) :)))

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  3. Nada como alimentos sanos, para cuerpo y mente. Una canción con mucha fuerza.

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  4. ¿Qué tendrá el (sub)consciente, que nos juega tan "malas" pasadas?
    ¿Qué tendrá la música, que siempre nos conduce allí donde ni siquiera sabemos que queremos ir?

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  5. Me sumo a los comentarios anteriores, es una pena que sufrir sea la mejor manera de aprender. Me gustó la canción un montón. Un abrazo.

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  6. ayyyy qué noche llevo que no me salen los comentariossss, decía que me fascina la capacidad de cegarnos que tenemos: por un lado cantabas ese himno de supervivencia y por otro te culpabilizabas de lo que tenías culpa...

    me encanta tu nueva sección!!

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  7. ¿te parece heavy Marcela? jajajaja a mi me parece una canciçon típica-básica de supervivencia jajajaj
    No me di cuenta que se daba por aludida hasta años después jajajaja

    La canción toda para ti Candelita bonita, hay que cantarla a diario! :)

    Eso mismo jirafita, es alimento para la mente, que nunca se nos olvide que lo que no mata, fortalece ;)

    Ays Marmarita... no sé que tendrá la mente pero de que es una cabra gorda, lo es...

    Bueno emejota, por fortuna a veces (sólo a veces) también es posible aprender en cabeza ajena. Pero si, lo fundamental se aprende a porrazos...

    ahi le has dado Farala... de pico yo era la más de lo más, pero en mi vida real era una agachona de lo peor. No canto vistoria, el carácter "rescatador" es una lacra difícil de combatir, está muy reforzado socialmente. ¡Qué bueno que te guste mi nueva sección! besitos

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  8. Uf!! veo tu post ahora, con 3 días de retraso...

    Esta canción siempre te servirá para recordar que debes evitar las relaciones tóxicas. Y si por algún motivo te ves dentro de alguna, podrás ponerte la canción para que te de fuerzas para salir!!

    Un beso!

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  9. no sólo subscribo los comentarios anteriores sino todo tu post. creo que por eso me da tanta pereza volver al amor a pesar de que tengo ganas de volver a vivir en el 2.

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  10. Chris: pues si, es una vacuna con armonía :)

    Ripley: así pensaba yo, que era una pereza volver a vivir en pareja... hasta que conocí a mi güera... las cosas llegan cuando tienen que llegar ;)

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  11. Hola!

    Eugenia también es una de mis favoritas :) y la canción me divierte por el juego y sarcasmo jejjeej

    no hay que tomarse tan en serio, verdad?

    saludos

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  12. Yo tampoco la conocía y también me la quedo, me gusta mucho la letra.

    Me alegra que salieras de aquella relación, y que hoy seas feliz al lado de tu guera.

    Besos.

    noche

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